Posts Tagged ‘padres’

Los adolescentes y el idioma del dinero 2 (trabajado es mejor)

En el post anterior a este tema hablaba acerca de la necesidad de fomentar en nuestros niños y adolescentes sobre todo, la importancia de tener su primer presupuesto, y en base a este el que ellos hagan conciencia acerca de los gastos que deben pagar a diario, y la responsabilidad que significa el manejar dinero que no solo se les da por obligación de parte de uno como padre.

La realidad triste y dura es que muy rara vez de esto los chicos aprenden algo que no sea que si se les llega a acabar el dinero antes de lo previsto, en su presupuesto asignado por semana, quincena o mes vuelven a pedirnos lo que les hace falta y muchas veces sin pensarlo se los damos. ¿Qué hacer? ¿Cómo enseñarle a mi adolescente que uno no siempre puede darles dinero para todo lo que se les antoje, sin parecer egoístas o llegar a tener un gran sentimiento de culpa paterno?

En mi experiencia con mis propias hijas creo que el asignarles trabajos ya sea dentro o fuera de casa es lo mejor para empezar. Si son menores de edad muy difícilmente o más bien imposible sera que entren a un Mc Donlads u otro de esos negocios a realizar sus primeros pininos laborales. Tengo una amiga que incluso cuando su hijo cumplió los 16 años lo mando a trabajar de cerillo al super, y aunque a no muchos padres les agradaría la idea aquí lo importante es generar en los chicos la conciencia de que para poder disfrutar ganancias fáciles a veces hay que «ensuciarse» un poco. Ayudar en las labores de casa no debería ser una manera de pagar a nuestros hijos ya que es responsabilidad de cada miembro de la familia el participar en ello por el bien general, pero hay algunas «labores» que pueden ser la excepción y en ese caso «pagarles» por hacerlo.

Cortar el césped si es que tienen en casa o de otros, lavar los coches ya sean los propios o de los vecinos, sacar a pasear mascotas, cuidar niños (si es que tienen la paciencia), son algunas de las cosas en que ellos pueden muy bien participar y de paso ganar su primer dinerito, que créanme después de realizar cualquiera de las tareas que mencione antes, aprenderán a valorar peso por peso lo mucho o poco ganado.

Es bueno también mencionar que al crear en ellos una mentalidad que no todo lo nuevo comprado por impulso o moda es por lo general lo mejor, les ayudará a tener una percepción más clara y objetiva acerca de adquirir por necesidad, a gastar por simple compulsión. 

Como podrán ver, hacer de nuestros hijos adolescentes, individuos capaces de manejar sus primeras finanzas personales no es tan difícil y complicado, solo se trata de tener un poco de creatividad para que tanto nosotros como ellos hagamos de el uso efectivo del dinero y su tiempo, una magnifica oportunidad de aprendizaje y de paso que resulte en un ahorro para el presupuesto familiar.

Como siempre si tienen alguna idea o sugerencia extra para el tema, los invitamos a que las escriban, ya que todo es nos es bueno para aumentar el conocimiento en general y así compartir incluso experiencias. Que tengan un gran inicio de semana y continuamos en familia… Salute!

Adolescentes y el idioma del dinero

Cuando mi pequeña niña paso de la infancia a la emocionante etapa de la adolescencia (aunque probablemente no para todos los padres sea precisamente «emocionante») recuerdo que no solo su cuerpo comenzó a tener cambios, sino que también su manera de vestir y de hablar. Es increíble ver como de ser los «super héroes» para nuestros hijos, caemos de un día para otro hasta el nivel de «pasado de moda», y ya hasta lo que uno piensa es obsoleto y gracioso para ellos. Y dentro de todos estos cambios de pesadilla, vienen junto con estos, su gusto creciente y más que peligroso por todo lo material: Que si quiero un Ipod Touch, que si un IPhone, que si una lap top, que si la sudadera de moda debe decir Abercrombie… en fin, que la lista abarca tantas cosas, que incluso si hace uno memoria, nosotros quizás poco tuvimos lo mismo a su edad. Y es que los tiempos cambian… pero el costo de las cosas no.

Tristemente estamos en una época en que todo podremos decirle a los hijos menos la palabra NO. Ya todo se vuelve negociable para ellos, o peor aun, una imposición obligatoria, ya que desde pequeños los hemos acostumbrado a darles todo sin casi ninguna restricción de nuestra parte, lo cual les hace tener la falsa impresión de que tienen por derecho y sin discusión, de recibir absolutamente TODO lo que nos piden.

En mucha parte debemos reconocer que nosotros hemos tenido la culpa, ya que el argumento más fuerte para apoyar esto es el de «Quiero que mi hijo/a tenga todo lo que yo no pude» y sin embargo pasamos por alto que en realidad al darles todo, les estamos haciendo mas un daño que un bien a sus vidas, ya que es seguro que al llegar a ser adultos muy poco tendrán para enfrentarse al mundo real que impone que para ser alguien hay que luchar por ello y no solo extender la mano.

Es por eso que se hace importante el enseñarles desde pequeños el valor del dinero, y no solo el de recibir una x cantidad de dinero los Domingos, sino también y más allá el de poder mostrarles que todo tiene un costo, y lo que implica el pagar algo con ese dinero a cambio de obtenerlo. Quizas ya tus hijos no son tan pequeños y están en la etapa en que sino están y tienen materialmente como los demás chicos de su edad, se sienten diferentes o rechazados, ya que la cultura de lo material es lo único que vale para tener y hacer «amigos».

Una propuesta que leí hace poco en una revista americana es la de organizarles su primer presupuesto. Quizas suene raro el hacerles algo que incluso para uno como adulto resulta casi imposible, pero ahí reside lo interesante, ya que al hacer juntos como padres e hijos un presupuesto ya sea semanal, quincenal o mensual les ayudara a ambos a entender el manejo sabio del dinero y la mejor manera de administrarlo para que cubra las necesidades básicas tanto de un niño como de un adolescente en sus gastos de cada día. Una cantidad dada por ejemplo, a la semana deberá cubrir alimentos, transporte (si es que toma camión para ir y venir a la secundaria o preparatoria), y cosas como copias o el pago de algún tramite escolar inesperado. Será el compromiso del chico hacer que le rinda esa cantidad durante una semana y si algo le llegará a quedar, motivarlo a que en vez de gastarlo lo ahorre, y así con esos sobrantes poderse costear una ida al cine o a comer con sus amigos.

Créanme que hacer que nuestros adolescentes se hagan responsables de sus propios gastos y gustos será una buena lección tanto para ellos porque así podrán valorar lo que es gastar incluso en un café de Starbucks o unas papas de C&A, hasta para nosotros que a veces no le vemos el fondo a tanto gasto y pedidera de dinero que por pequeños que sean tiene un peso sobre nuestros pesos. 

Si tu como papá tienes algunas otras ideas para ayudar a los adolescentes y niños a ser más prudentes con sus gastos les invito a que los compartan y así de paso darnos una ayudadita entre todos. Y ya para el siguiente post seguire un poco más con este tema e ideas para que los chicos hagan su propio dinerito…. Salute!

Bullying: Acoso y agresión infantil en aumento

Cuando uno era pequeño e íbamos a la escuela, era común que ya fuera en el recreo o a la hora de la salida, algún par de niños se agarraran a golpes para solucionar sus diferencias, o porque uno le dijo al otro algo que no le pareció. Por lo regular estos pleitos terminaban con la nariz sangrando, el uniforme lleno de polvo y claro, una visita inevitable a la dirección, junto con un castigo para sosegar a los pequeños rijosos. Sin embargo, casi 30 años después las cosas han cambiado, y mucho. Lo que antes eran pleitos comunes entre chavos se han convertido en todo un acoso verbal, físico e incluso psicológico, que ha llevado a que los que son victimas de ellos, se sientan totalmente acorralados y muchas veces incomprendidos por parte de sus padres y autoridades escolares. Ya no se trata solamente de arreglar diferencias fuera del salón de clases, sino que ahora cierto grupo de niños es agredido por otros de maneras tan crueles como diferentes, para así hacer de su día de escuela todo una experiencia terrorífica y sin final.

Lamentablemente el bullying es una práctica que pasa tan inadvertida por parte de padres y maestros, a causa del silencio ya sea auto impuesto por quien lo padece, o por medio de amenazas, que solo es hasta que ocurre algo más grave cuando se da uno cuenta de lo que estaba ocurriendo.

¿Que podemos hacer entonces como padres, maestros y autoridades para poner freno a esta cada vez más creciente ola de violencia escolar? Primeramente y como parte fundamental es el informarnos acerca de lo que es el bullying y de que maneras se presenta:

Bullying proviene de una palabra Holandesa que significa acoso, el cual es cualquier forma de maltrato psicológico, verbal o físico de una forma metódica y reiterada a lo largo de un tiempo determinado a una persona. El tipo más predominante es el emocional, en el cual la víctima es blanco de quienes lo acosan, de burlas, insultos o amenazas. Los protagonistas frecuentes de acoso escolar son niños en proceso de entrada a la adolescencia (entre 12-14 años) aunque ya se han registrado casos de niños acosadores desde los 4 años. Cuando el acoso se convierte en agresión física estamos en presencia de violencia escolar, en la cual el que la lleva a cabo, sume a su víctima por medio de golpes, y aprovechando de ser más fuerte o estando con más cómplices, en un estado de temor constante, además de otros tipos de secuelas como: tristeza, depresión, falta de apetito, miedos nocturnos, poca concentración en clase, negarse a asistir a la escuela, etc.  Una consecuencia extrema de estos síntomas puede llevar a quien la sufre de pensamientos suicidas como única vía de escape a sus agresores.

Ahora bien, una pregunta es el porque del bullying, ¿Cual es el objetivo o propósito al hacer sufrir a alguien indefenso? El objetivo al practicar el acoso escolar o bullying es el de simplemente intimidar, apocar, reducir, someter, aplastar, humillar y consumir a quien se convierte en víctima de los acosadores, dándole a estos una especie de control, dominación y placer al lastimarlo.

Se han identificado 8 tipos de acoso escolar:

  1. Bloqueo Social
  2. Hostigamiento
  3. Manipulación
  4. Coacciones
  5. Exclusión Social
  6. Intimidación
  7. Agresiones
  8. Amenazas

 Las causas de acoso escolar son varias, y van desde algún trastorno psicopatológico del agresor, el cual le impide sentir algún tipo de empatia ante el sufrimiento del acosado, hasta el tipo de entorno de la escuela misma que obstaculice de algún modo la sana convivencia de quienes asisten a ella, pasando incluso por factores de influencia externa como la televisión, los video juegos o que el mismo acosador sufra de violencia intrafamiliar, lo que lo llevaría a descargar sus frustraciones en otros.

Llegados a este punto la preocupación de los padres es la de buscar soluciones para evitar en lo posible la aparición de casos graves de acoso o agresión escolar, y las maneras adecuadas para enfrentarlo, brindando no solo ayuda a quien lo padece sino al agresor mismo. Aquí lo que es importante a destacar es la prevención la cuál se puede realizar en dos niveles:

  • Primaria: Esta quedaría como responsabilidad en los padres, los medios de comunicación y la sociedad en conjunto realizando acciones que promuevan el sano desarrollo de los niños por medio de platicas e información.
  • Secundaria: En la cual entrarían ya en forma, métodos concretos sobre los que son los principales involucrados en el bullying, como son los adolescentes, llevando a cabo junto con el profesorado las medidas pertinentes que permitan identificar y  tratar eficientemente el acoso escolar.

En conclusión: aunque las diferencias y conflictos entre los niños y adolescentes son algo natural y forman parte de su desarrollo y socialización, es importante el observar que estos no lleguen a convertirse en actos de violencia contra sus compañeros, identificando de manera oportuna tanto al agresor como al agredido, llevando a cabo tanto en la casa como en la escuela programas de sana integración y evaluaciones psicológicas que lleven a padres como a maestros a la detección oportuna del bullying y a que este sea detenido.

 Fuentes consultadas: http://es.wikipedia.org/wiki/Acoso_escolar

 

La Escuela de Hoy: Educandonos Para Ser Mejores Personas

Siguiendo con el hilo de ideas que he estado planteando acerca de como nuestros hijos, sean pequeños o adolescentes, deben ser enseñados por nosotros a ser moderados y equilibrados tanto en el área financiera como en el uso de la nueva tecnología, queda entonces como punto y meollo central de análisis, que papel juega el sistema educativo en su formación, tanto en las áreas de conocimientos básicos como en las que corresponden a las de su desarrollo humano y de valores.

Y leyendo esta semana la revista «Mente Sana» que dirige el Dr. Jorge Bucay, reconocido terapeuta gestalico, menciona en su editorial de Diciembre del 2009 lo que en la actualidad esperan las familias del sistema escolar para sus hijos y lo que a su ves esta pide de ellos. Esta lista abarca los siguientes aspectos:

De los padres a la escuela estos esperan:

  1. Una aportación de datos y conocimientos diversos que servirán para «toda la vida», osea los que ayuden a los niños y jóvenes a ser exitosos en sus futuros trabajos.
  2. Un sólido entorno social que haga de la escuela un lugar a donde el niño quiera ir y que lo entrene en el área de las relaciones interpersonales para ser capaz de convivir con otros al llegar a ser adulto.
  3. Un ambiente que lo forme y eduque en valores esenciales que orienten su postura ética y moral, al mismo tiempo que lo alejen de desvíos conductuales y comportamientos antisociales.
  4. Un espacio seguro que valide y respete a los niños como individuos diferentes y libres, impulsando sus capacidades y ayudándolos a superar obstáculos.

Ahora bien, ¿Qué es lo que las escuelas esperan de nosotros como padres? Nos parezca o no estas son sus expectativas:

  1. Un compromiso activo con respecto al observamiento de las reglas exigidas a su sistema: horarios, aseo, uniformes, asistencia, etc.
  2. Un apoyo efectivo a la hora de reforzar en casa lo aprendido en clase, lo cual incluye ayuda en las tareas de los niños, provisión de materiales para hacerlas y reforzamiento de ciertos hábitos como la lectura, la disciplina y el respeto a las autoridades.
  3. Cuidados básicos (alimentación sana, descanso suficiente y demostraciones de afecto), además del consabido tiempo de calidad dedicado a ellos: paseos, juegos, diálogos. Con lo cual se pretende alejar a los pequeños de acaparamientos con el Internet o televisor.
  4. La presencia activa e interesada de los padres en las juntas escolares que tengan que ver con la mejora continua de la educación y el cuidado del entorno escolar.

Como se ve, aunque podría parecer que de ambas partes las exigencias son razonables, la realidad es que el escaso tiempo que se tiene a causa de que uno o ambos padres viven inmersos en sus trabajos, ocasiona que rara vez se de uno cuenta de cumplir con su parte, y se pretende dejar totalmente en manos de la escuela la formación integral del niño, lo cual causa en determinado momento confusiones tanto en padres como en los hijos e incluso los maestros, por querer suponer lo que debe ser la obligación de cada uno de ellos.

En definitiva en lo que respecta a conocimientos educativos y una calidad en la infraestructura, corresponde a la escuela el otorgarlos, pero es primariamente nuestra responsabilidad como padres el formar a nuestros hijos desde que nacen en cuanto a  lo que es su desarrollo humano. Nunca se podra sustituir el convertir a nuestro pequeño en un adulto equilibrado, responsable y comprometido con una clase de Ciencias Naturales o de Matemáticas. Si deseamos que ambos caminos, el de la enseñanza en el aula y el que recibe en el seno del hogar, se entrelacen y provoquen el resultado que como padres tanto anhelamos (Un profesionista de éxito) comencemos por darles a ellos el tiempo necesario para hacer de su estancia en los salones de clase no algo que los atormente y los haga sentir frustrados y estresados, sino una transición agradable e incluso divertida si se usan métodos alternos para ayudarles en las áreas que se les dificulten. No por algo cada año se presentan cada vez mas casos de deserción en las escuelas, por el alto grado de frustración que manifiestan los alumnos al sentir que «no pueden» con sus asignaturas, o peor aun, creer que no nacieron para el estudio.

Lamentablemente el tipo de educación que reciben los chicos, los orilla a hacerlos como computadoras llenas de datos, sin que comprendan para que sirven estos, y sin motivarlos a cuestionar si lo que les enseñan es valido, verdadero y único. Rara vez se les mueve a buscar otras respuestas, otros caminos de solución, así que la enseñanza se vuelve metódica, repetitiva e incluso fastidiosa.

Pero no todo es oscuro en este panorama, gratamente han surgido estudios como el de la Inteligencia Emocional, los cuales se han propuesto probar que el famoso IQ, ya no es medible tan solo por el conocimiento reproducido a la perfección, sino que es un conjunto de varias cosas, incluidas entre ellas las que tiene que ver con el desenvolvimiento del individuo en su vida diaria. El equilibrio emocional y psicológico se vuelven entonces, en piezas fundamentales para que se conviertan en triunfadores absolutos en un medio que día con día se vuelve ferozmente competitivo, y donde saberse expresar y desenvolverse es tan valioso como el conocimiento cognoscitivo. 

 Resumiendo entonces, aunque reconocemos que recae en las escuelas una buena parte de la formación de nuestros hijos, es en gran medida nuestra responsabilidad el hacer de ellos el día de mañana, los adultos felices, comprometidos y realizados que ocuparan el lugar que nosotros ahora tenemos. Y esta tarea solo será completada satisfactoriamente en la medida en que como padres, nos involucremos no solo en que aprendan de memoria las materias, sino ademas, y lo mas importante podríamos decir, en inculcarles en sus mentes y corazones aquellos valores que los harán seguros de si mismos, y dispuestos a afrontar cualquier obstáculo que se les presente en su vida diaria, sin temor a fracasar.

En el siguiente post se analizara cuál es en realidad la mejor escuela para nuestros hijos y como influira está en el desarrollo de sus capacidades.

Y si tienen alguna duda, comentario o sugerencia por favor haganosla saber y con mucho gusto seran recibidas. Todo es de ayuda y retroalimentación tambien para nosotros y es una forma tambien de crecer. Gracias y Salute!